Este dato no nos puede dejar indiferentes, un deporte [¿?] para unos pocos señoritos que gastan tanta agua con el único fin de ver verdes sus vastas extensiones de campo especulado, talado, mutilado, muerto bajo la alfombra. Agonizante.

Y lo peor es que nuestro país es de los europeos que más metros cuadrados de campos de golf tiene por habitante, y nuestros políticos no sólo se lavan las manos, sino que dan ejemplo >>

Sin ir más lejos, según nos cuenta un lector por correo, la modélica presidenta de la Comunidad de Madrid tiene pensado construir uno en pleno Parque Natural de la Sierra del Guadarrama, el mismo que quiere que la UNESCO declare como Parque Nacional. Surrealista. Patético.